QUERIDO HERMANO...

Querido hermano;
¿Por qué te fuiste tan aprisa,
Sin un beso, un abrazo, una sonrisa?

Nos dejaste un vacío
que jamás podrá llenarse,
sólo nos quedan tus recuerdos;
los momentos
que pasamos cuando niños.

¡Tus locuras, travesuras,
las preguntas que me hacías
que a veces se quedaron
sin respuestas!
¡Te extrañamos todos...
Tus hermanas, tus sobrinos
tus amigos!

Quiero que sepas que te quise
con locura, con mucha pena,
con ternura...
Que perdones los momentos
que te hice mil censuras.

Solo quería que no te fueras
de mi lado.

Qué duras junto a mí toda
la vida
y aunque el Señor necesitaba
tu presencia;
nosotros aún no aceptamos
tu ausencia.

¡Adiós hermano!
Por ahora, pues algún día
volveremos a encontrarnos.

Y de nuevo, junto a Dios,
seguiremos de la mano...

Tú hermana